EL CORAZÓN DEL CAÚCASO,GEORGIA.
Actualizado: 6 may 2020

Tras varios meses, estaba deseando viajar a Georgia, hasta entonces un país totalmente desconocido para mí y el cual he podido descubrir gracias a una de las personas más importantes en mi vida. Georgia se ubica al sur de Rusia, en pleno corazón del Cáucaso, entre el mar Negro y el mar Caspio.
Georgia (საქართველო) tiene un paisaje escarpado e impresionante, que se encuentra en pleno desarrollo turístico, mantiene su propio idioma y alberga una riqueza cultural y humana igual o más profunda que los demás.Es difícil hacer un resumen de la intensa y en ocasiones muy complicada historia de la región, pues probablemente estemos ante la más diversa del mundo, tanto en el plano lingüístico, cultural como religioso, de un clima y aguas minerales con propiedades curativas, de parques nacionales y lugares reconocidos Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y de una gastronomía muy rica.
Tiflis es la capital y orillas del río Mtkvari es el más cómodo punto de acceso al país. Desde allí se pueden explorar ciudades costeras como Batumi, las espectaculares montañas y valles del Cáucaso o pequeñas aldeas cerca de la capital como Gori, pueblo natal de Stalin.
Georgia ofrece imponentes paisajes, y una cercanía de las nevadas montañas del Cáucaso con las cálidas aguas del mar Negro, es reconocida por la cuna del vino, una parte integrante de la cultura georgiana que poco a poco fue conquistando las mesas de los griegos y romanos hasta llegar a nuestros días. Mientras recorres Georgia descubres espectaculares monasterios ortodoxos de una fascinante historia que se evidencia en ruinas incluso de la edad de Hierro, es un país en que la tradición pervive en todas las esquinas, aunque la calidez y amabilidad de su gente es lo inolvidable de este viaje.
“Y una de las leyenda acerca de la naturaleza de Georgia es que, cuando Dios distribuyó la tierra entre las naciones, los georgianos fueron los últimos en recibir debido a que llegaron tarde por estar previamente dándose un banquete a pleno sol. Así, Dios les dijo que ya no quedaba territorio alguno, y los habitantes de Georgia justificaron su demora debido a que realizaban un acto de alegría a pleno sol en el que brindaban a la salud de Dios. Éste, tras recibir invitación para unirse a ellos y ver una serie de danzas típicas quedó impactado y decidió darles el pedazo de tierra que se había guardado para sí mismo e irse a vivir a las nubes”.
Uno se pone triste cuando termina un viaje y no es justo sentirse así lo sé. Hemos hecho todo lo que nos hemos propuesto y todo nos ha salido bien hasta el último minuto, sé que pronto volveré, ya que aún nos queda mucho por descubrir de esta preciosa tierra.
Para Sofía.